Los pacientes que sufren Hiperacusia sienten una incomodidad física ante la exposición a estos sonidos y su reacción viene determinada por las características físicas, el espectro y la intensidad del ruido.
Al disminuir la tolerancia a los sonidos, la Hiperacusia provoca malestar e incomodidad a quienes la padecen. Esta patología se origina en el interior de las vías auditivas, a diferencia de la fonofobia que se encuadrada dentro de los trastornos fóbicos. En un 60% de los casos, las personas con Hiperacusia sufren también acúfenos, aunque según indica la revista Gaceta Audio solamente el 1,5% de la población general presenta una disminución de la tolerancia a los sonidos ambientales y requiere comenzar un tratamiento.
Síntomas más comunes de Hiperacusia.
Las personas con Hiperacusia sufren una disminución de la tolerancia a los sonidos que se encuentran por encima de los 90 dB, cuando una persona con audición normal puede soportar sin malestar sonidos hasta los 120 dB. Esta intolerancia a los sonidos corrientes condiciona la vida diaria de los pacientes a los que incluso el roce de la tela puede generar malestar e incluso dolor. Los afectados por la Hiperacusia coclear, el tipo más frecuente de esta patología, además de la intolerancia a los sonidos pueden sufrir dolor en el oído, ataques de pánico, episodios de llanto, acúfenos y sensación de objetos extraños. Estos síntomas generan en las personas con Hiperacusia niveles elevados de estrés y ansiedad, pues les preocupa escuchar algún sonido que active estos episodios.
Las causas de la Hiperacusia.
Hoy en día se siguen investigando las causas de la Hiperacusia y se relaciona esta dolencia con una disfunción del sistema nervioso auditivo. Algunas de las causas más frecuentes son:
La exposición a altos volúmenes durante tiempo prolongado.
Una exposición repentina a altos niveles de decibelios, como en el caso de un disparo.
Síndrome de Ménière.
Trastornos de la articulación temporomandibular.
Lesiones por cirugía en el oído.
Migraña.
Depresión.
Contusiones cerebrales.
Síndrome de Williams.
Infección de oído crónica.
Acúfenos.
La Hiperacusia puede presentarse en personas que sufren pérdida auditiva o no pues no está relacionada con los umbrales auditivos.
Tratamientos para la Hiperacusia
Una vez diagnosticada la Hiperacusia el especialista recomendará un tratamiento para disminuir la intolerancia a los sonidos. La terapia sonora es el tratamiento con más éxito, con ella se busca reeducar el nervio auditivo para acostumbrarse a los sonidos cotidianos. El paciente irá adaptándose de nuevo a los sonidos mediante una terapia de ruido blanco; los volúmenes se irán incrementando en cada sesión y la duración total del tratamiento dependerá de cada paciente.
Si te ha parecido interesante, por favor, compártelo ¡Gracias! Esperamos que vuelvas.